El colectivo Ahaztuak 1936-1977 calificó de positiva la decisión de Garzón de abrir una investigación sobre los desaparecidos de la Guerra Civil e indicó que deja en «evidencia» el «modelo español de impunidad» que «cimentó» la Transición.
Ahaztuak consideró «esclarecedor» que más de treinta años después de la muerte de Franco no exista en España un «censo oficial de represaliados, asesinados y desaparecidos del franquismo». Este colectivo pidió que no se convierta en una «simple cuestión mediática» y sirva para ofrecer, «de una vez por todas, verdad, justicia y reparación a las víctimas del régimen franquista».
La Asociación de Familiares de Fusilados de Navarra también valoró «positivamente» la decisión del juez aunque la adopte con «cautela». A su juicio, «la desaparición es uno de los aspectos más dramáticos de lo acontecido durante la Guerra Civil y el franquismo» y que por ello «son las administraciones públicas las que deberían afrontar de oficio la localización y exhumación de los miles de restos que aún hoy hay en nuestras cunetas».
(Diario Vasco. 3 / 09 / 08)