El Pleno del Ayuntamiento de la ciudad castellana de Salamanca ha rechazado, con los votos del PP, una nueva moción del PSOE para retirar al ex jefe del Estado español, el general Francisco Franco, el título de «alcalde de honor a perpetuidad», concedido en 1954; la Medalla de Oro de la ciudad, otorgada en 1948; y el medallón que tiene en la Plaza Mayor.
La propuesta del PSOE, que ya fue realizada en enero de 2007 con el mismo resultado negativo, fue rechazada por el PP, que cuenta con mayoría absoluta, sin ni siquiera ser debatida. El PSOE volvió a plantear la pasada semana la misma moción que hace un año aludiendo que en estos momentos ya está en vigor la "Ley de Memoria Histórica". Asimismo, añadió la retirada del medallón de la cara de Franco de la Plaza Mayor, uno de los lugares más visitados de Castilla.
El portavoz municipal del PSOE, Fernando Pablos, recordó que la "Ley de Memoria Histórica" establece que «las administraciones públicas, en el ejercicio de sus competencias, tomarán las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura». Pablos también destacó que «la actual corporación municipal democrática no puede aceptar que mantenga los máximos honores del Ayuntamiento el responsable de miles de asesinatos políticos ilegítimos, entre ellos el del alcalde democrático de Salamanca Casto Prieto Carrasco y los de los concejales Manuel de Alba Ratero, Luis Maldonado Bonatti y Casimiro Paredes Mier». El dirigente del PSOE considera que la decisión adoptada por el PP es «lesiva para la imagen pública de Salamanca, que no es ningún residuo del franquismo, y contraviene la legislación vigente».
La moción del PSOE se presentó una semana después de que la Universidad de Salamanca decidiera rechazar la concesión del título de doctor honoris causa a Franco, realizada el 8 de mayo de 1954.
Defensa del expolio fascista
El PP de Salamanca, liderado por el alcalde Julián Lanzarote, ha protagonizado otras actuaciones en defensa del franquismo. Así, en abril de 2005, se opuso ferozmente a la decisión del Gobierno español de devolver a la Generalitat de Catalunya parte de los documentos que las tropas fascistas incautaron.
Junto a ello, la decisión de Lanzarote de subir desproporcionadamente las tasas municipales provocó una masiva movilización vecinal.
(Gara. 13 / 05 / 08)