Esta mañana en los locales de Zabaldi en Iruña ha tenido lugar la presentación pública de "Ahaztuak 1936-1977" en Navarra. Esta presentación tuvo el formato de rueda de prensa en la que tomaron parte diferentes personas descendientes de represaliados por el régimen franquista junto con otras que no los son directamente pero que comparten la necesidad de trabajar para que las victimas del franquismo vean cumplidas sus demandas de verdad, reparación y justicia. Junto con ellos tambien estuvo presente en la rueda de prensa Martxelo Alvarez, portavoz actual de este colectivo.
Sería Alvarez el primero en tomar la palabra para señalar que desde su surgimiento “Ahaztuak 1936-1977” ha tenido como objetivo el conformarse tambien en Navarra aunque esto haya de hacerse por separado debido a las evidentes razones administrativas. Las razones para ese planteamiento las explica el portavoz de Ahaztuak por “la evidente existencia de una Memoria Histórica democratica y antifascista común en muchos aspectos entre las tres provincias vascas de la CAV y Navarra”. En este sentido remarcó que la perspectiva de Ahaztuak “no es una opción politica, ni una opción territorial, sino una opción democratica, lo mismo que la Memoria Histórica que defendemos. La Memoria Historica democratica de Navarra esta conformada, al igual que la de las provincias de la CAV, por diferentes vertientes: la republicana, la nacionalista o independentista o la navarrista en sus diferentes matices y variedades. A todas ellas, a todos los luchadores y represaliados de esas vertientes respetamos, reivindicamos y damos cabida desde el punto de vista de opciones populares que fueron y que se enfrentaron al franquismo y fueron represaliadas por el”.
Tras él sería Javier Garcia, miembro de “Ahaztuak” en Navarra el que señalaría los objetivos generales de la asociación para despues remarcar el porqué de la necesidad del trabajo de esta en el territorio foral, graficamente subrayado según él “por hechos como el de la existencia aún en esta ciudad de abundante y ostentosa simbologia franquista como el Mausoleo a Mola y Sanjurjo, las declaraciones y actuaciones de UPN, partido que ostenta el poder politico en Navarra, en torno al regimen franquista o las recientes declaraciones del arzobispo de Pamplona o las de su antecesor Fernando Sebastian". “Para todos ellos –dijo-, el golpe franquista fue algo legitimo y no repudiable y forma parte de su memoria historica, algo que como vemos reivindican y defienden a capa y espada cada vez con menos complejos”. En el caso del actual arzobispo Francisco Pérez, Garcia opinó que “lógicamente para una Iglesia que avaló en todos los momentos el golpe franquista, que avaló el regimen franquista durante cuarenta años y que sigue siendo socio inseparable de la derecha mas cavernaria en Navarra y en el estado la Memoria Histórica democratica y todo lo que esta implica es algo que no le gusta en absoluto”.
Como punto final de la rueda de prensa Marcelo Alvarez y Javier García señalaron que la puesta en marcha de Ahaztuak 1936-1977 en Navarra se da en un momento muy especial, cuendo “se intenta a traves de esa filfa a la que llaman Ley de Memoria Histórica el acabar con la reflexión social que en torno al franquismo, a sus crímenes, a sus responsabilidades… y a las necesarias politicas de verdad, reparación y justicia para con las victimas del franquismo se ha abierto en nuestra sociedad”. Por ello plantearon que uno de las tareas en las que centrarán el inicio de su actividad en Navarra será la crtitica pública de esa Ley en sus contenidos actuales, una Ley que como dijeron “no es capaz, entre otras cosas, ni de anular en el sentido juridico y en todas sus consecuencias las sentencias y las condenas del régimen franquista. Con esta Ley nuestros familiares fusilados, encarcelados, expropiados, condenados… seguirán siendo culpables”. En ese mismo sentido declararon no entender cómo “desde ámbitos politicos de izquierdas y progresistas, que dicen avalar las demandas de las victimas del franquismo, se puede dar como buena” y pidieron a PSN, IU y NaBai “reconsiderar su opinión frente a la misma”.
(Servicio de Prensa de Ahaztuak 1936-1977 )