martes, noviembre 22, 2011

GUDARO Y MIRANDA DE ARGA SON LOS ESCENARIOS DE LOS DOS RELATOS QUE RECOGERÁ UN NUEVO LIBRO QUE AHAZTUAK 1936-1977 PUBLICARÁ PARA LA AZOKA DE DURANGO


Se suele decir que en suelo navarro, en toda la extensión geográfica del Viejo Reyno, no hubo “frente de guerra” por triunfar de forma inmediata y contundente el golpe militar que el 18 de julio de 1936 era puesto en marcha en diferentes puntos del estado español y que estaba encabezado entre otros por el general Emilio Mola Vidal, “el Director”, máxima autoridad militar de Navarra.
Pero aunque esto sea asi dicho por no haber habido en esos momentos dos ejercitos enfrentados, dos contendientes estructurados militarmente, armados y en lucha abierta, lo cierto es que el “frente de guerra” se instaló en toda Navarra desde el mismo momento del golpe, e incluso antes. En cada pueblo, en cada ciudad, en cada calle, en cada rincón de nuestra geografia los miembros uniformados o no del ejercito golpista y sus colaboradores del requeté, de la Falange, de la Iglesia, de la ciudadanía... abrieron una linea de fuego contra toda organización politica, sindicato, asociación o persona individual señalada como opositora de los valores e intereses que el Alzamiento pretendía imponer o restaurar: la propiedad de la tierra y los medios de producción en pocas manos, el sacrosanto poder de la Iglesia y su influencia desmesurada sobre la enseñanza y sobre las conciencias que es tanto como decir sobre la vida social y politica, las prebendas de los militares y sus concepciones gran-españolas frente a las naciones sin estado de la Península e imperialistas y coloniales frente a otros pueblos y naciones externas a ella... Un esquema para el que la paz social era imprescindible, para el que la docilidad de las clases populares era necesario, para el que la renuncia de personas y Pueblos a cualquier veleidad o aspiración de libertad práctica era condición sine qua non.

Y a ello se aplicaron con esmero los golpistas desde el primer dia. La directriz de Emilio Mola, cabeza militar del golpe en Navarra les marcaba el camino: “Hay que sembrar el terror... hay que dejar la sensación de dominio eliminando sin escrúpulos ni vacilación a todos los que no piensen como nosotros”. Y asi de la Montaña a la Ribera, de Aoiz a Larraga o de Altsasu a Tudela, ese frente no declarado oficialmente en parte de guerra alguno se cobró muchas más victimas civiles que en Gipuzkoa y Bizkaia, tambien territorios vascos donde el enfrentamiento bélico tuvo un carácter declarado y abierto.

De ello nos habla este libro que hace el cuarto de nuestra colección “Izarren Hautsa” y que es el primero de los que editamos que incursiona en la narrativa literaria para ofrecernos dos relatos que reflejan ese tiempo del que hablamos. El primero de ellos, “Gudaro 1936”, nos lleva desde la invención de su nombre y desde la realidad de sus hechos a cualquier pueblo posible de la montaña navarra en las jornadas previas y posteriores al 18 de Julio de 1936, dandose cita en las calles de esa ficción los sectores sociales, las ideologias, los intereses y las contradicciones de todos ellos que asisten puntuales al encuentro que lleva gestándose tanto tiempo, a veces de forma abierta e incluso violenta, y otras de forma soterrada y menos visible, pero no por ello menos ciert

El segundo, “Martinico”, nos acerca a una realidad social diferente, traspasada por otra problemática, y nos situa no en el golpe propiamente dicho o en los hechos del mismo, sino en sus razones, en su gestación, en la lucha por la tierra, elemento central en la lucha de clases de la Ribera navarra y en la potente organización sindical agraria, obrera y popular que el golpe y la represión posterior tuvieron como objetivo desarbolar. “Martinico” nos apunta desde la brutalidad de unos hechos represivos “puntuales” ocurridos en Miranda de Arga algunos años antes lo que despues seria criminal estrategia cotidiana.

En 1918 una movilización en defensa de los comunales deja sobre las calles de Miranda cuatro muertos producidos por la carga de la Guardia Civil, secular guardiana de los intereses de los ricos y los caciques. Años despues, en 1932, se forma el “Sindicato Unico de Obreros y Campesinos” y en 1935 las fuerzas de izquierda asientan su nivel organizativo que se verá reforzado junto a su combatividad, por el triunfo del Frente Popular en Febrero de 1936, algo que al igual que en otros lugares de la Península con una potente organización campesina -Badajoz por ejemplo- conllevará pocos meses despues la brutal represión desatada con el golpe del 18 de Julio que tomará el carácter de una verdadera masacre en la que ya no sólo tomará parte la Guardia Civil, sino los “escuadrones de la muerte” de la Falange comandados por personajes de odiado recuerdo como fue en este caso y en esta zona Pedro Díaz Terés, el “Chato Berbinzana”, que dejarian tras de si la muerte, el terror y el llanto subrayados por casi dos decenas de asesinados, de igual número de personas escarnecidas publicamente con la denigrante práctica del corte de pelo, de multas, de palizas...

Gudaro y Miranda. Dos pueblos, dos localidades de ficción y realidad entreveradas por el lazo de una estrategia golpista y genocida que arrasó las esperanzas de libertad y justicia social de decenas de miles de personas y que hoy gritan y piden verdad, justicia y reparación desde las lineas de los dos relatos que en este volumen ofrecemos. Dos relatos -uno escrito por Ekaitz Zabalza, joven miembro de la generación joven y otro por Koldo Laguardia, el nieto de “Martinico” ya jubilado- que además de ser el estreno de sus autores no tanto en lo de escribir como en lo de publicar, nos muestran como el agua de la memoria bebida en fuentes diferentes y distantes han empapado tan hasta los huesos como para sentir la necesidad de plasmarlo por escrito a muchas personas pertenecientes a las generaciones que, como canta Evaristo, somos los hijos y los nietos de los que perdieron la guerra civil.

Gudaro y Miranda. Los escenarios de los dos relatos que son recogidos en este nuevo libro que desde Ahaztuak 1936-1977 y en nuestro sello "Izarren Hautsa" srá uno de los dos que presentaremos para esta nueva edición de la Feria de Durango que se celebrará entre los dias 4 y 8 del próximo mes de Diciembre.

AHAZTUAK 1936-1977