Una docena de miembros de la asociación de victimas del golpe de estado, de la represión y del régimen franquista Ahaztuak 1936-1977 se han concentrado este mediodia en el Parque de Doña Casilda de Bilbao, frente al acto que junto a la estatua “Memoria Viva” del escultor Nestor Basterretxea ha realizado la Corporación bilbaina, “en honor de todas las victimas del fraqnuismo” según rezaba su convocatoria.
El acto oficial contó con la presencia de algo más de sesenta personas y ha sido notoria la falta de asistencia de ciudadanos al mismo toda vez que la practica totalidad de los presentes eran los miembros de la corporación, una decena de ujieres con librea, varias decenas de escoltas y policias de paisano y periodistas. Es de destacar que el grupo de victimas y familiares de las mismas que iban a asistir al acto, todas ellas miembros de Ahaztuak 1936-1977 se les ha impedido el acceso al mismo por parte de fuerzas de la Policia Municipal y de la Ertzaintza que ha procedido a un amago de identificación de este grupo de personas, situandose tras esto las mismas a una veintena de metros del acto oficial tras una pancarta en la que se podia leer en euskera y castellano “Omenaldirik onena: justizia – El mejor homenaje: la justicia” y permaneciendo alli una media hora, tiempo que se ha prolongado el acto oficial.
Durante el mismo, que ha contado con la representación de todas las fuerzas polticas presentes en el Ayuntamiento, el alcalde Iñaki Azkuna ha expresado su homenaje “a todos los que sufrieron el franquismo, un régimen hoy felizmente desaparecido” y ha remarcado “que esta que tenemos es la democracia por la que lucharon los antifranquistas”.
Tras su finalización las victimas del franquismo y sus familiares situados tras la pancarta de Ahaztuak 1936-1977 han respondido a las preguntas de varios de los medios de comunicación que cubrian el acto, expresando su profundo malestar por “la utilización para el mero marketing politico, que con nosotros y nuestros familiares pretenden realizar a traves de actos como este politicos como los aqui presentes e instituciones como la que lo han convocado”. Han remarcado su critica llamando la atención sobre “la falta de consideración hacia nosotros y nuestras demandas de verdad, justicia y reparación de la que hacen gala, algo más que evidente cuando incluso han realizado este acto en un espacio situado al final del paseo Rafael Sánchez Mazas, es decir en un espacio dedicado a un jerifalte e ideólogo fascista que aún mantiene este paseo en su honor gracias a la permisividad y complicidad de esta Corporación que hoy dice homenajear a las victimas del franquismo”.
Asimismo han expresado su denuncia pública ante el hecho de haberles sido impedido por la fuerza policial acercarse a este acto “al que publicamente habian sido invitadas las victimas del franquismo y sus familiares, asi como la ciudadania” mientras en el mismo según han señalado “estaban presentes entre otros los representantes del PP, grupo que la pasada semana presentaba en las Juntas Generales de Bizkaia una proposición para que cualquier elemento de simbologia arquitectónica, incluida la simbologia franquista, sea conservado en el lugar que ocupa” y cuya presencia en este acto “muestra bien a las claras el soberbio ejercicio de cinismo de algunos y el sentido real del evento, que no puede ser visto sino como una aportación más del Consistorio bilbaino al modelo español de impunidad para los crimenes del régimen franquista”.
El acto oficial contó con la presencia de algo más de sesenta personas y ha sido notoria la falta de asistencia de ciudadanos al mismo toda vez que la practica totalidad de los presentes eran los miembros de la corporación, una decena de ujieres con librea, varias decenas de escoltas y policias de paisano y periodistas. Es de destacar que el grupo de victimas y familiares de las mismas que iban a asistir al acto, todas ellas miembros de Ahaztuak 1936-1977 se les ha impedido el acceso al mismo por parte de fuerzas de la Policia Municipal y de la Ertzaintza que ha procedido a un amago de identificación de este grupo de personas, situandose tras esto las mismas a una veintena de metros del acto oficial tras una pancarta en la que se podia leer en euskera y castellano “Omenaldirik onena: justizia – El mejor homenaje: la justicia” y permaneciendo alli una media hora, tiempo que se ha prolongado el acto oficial.
Durante el mismo, que ha contado con la representación de todas las fuerzas polticas presentes en el Ayuntamiento, el alcalde Iñaki Azkuna ha expresado su homenaje “a todos los que sufrieron el franquismo, un régimen hoy felizmente desaparecido” y ha remarcado “que esta que tenemos es la democracia por la que lucharon los antifranquistas”.
Tras su finalización las victimas del franquismo y sus familiares situados tras la pancarta de Ahaztuak 1936-1977 han respondido a las preguntas de varios de los medios de comunicación que cubrian el acto, expresando su profundo malestar por “la utilización para el mero marketing politico, que con nosotros y nuestros familiares pretenden realizar a traves de actos como este politicos como los aqui presentes e instituciones como la que lo han convocado”. Han remarcado su critica llamando la atención sobre “la falta de consideración hacia nosotros y nuestras demandas de verdad, justicia y reparación de la que hacen gala, algo más que evidente cuando incluso han realizado este acto en un espacio situado al final del paseo Rafael Sánchez Mazas, es decir en un espacio dedicado a un jerifalte e ideólogo fascista que aún mantiene este paseo en su honor gracias a la permisividad y complicidad de esta Corporación que hoy dice homenajear a las victimas del franquismo”.
Asimismo han expresado su denuncia pública ante el hecho de haberles sido impedido por la fuerza policial acercarse a este acto “al que publicamente habian sido invitadas las victimas del franquismo y sus familiares, asi como la ciudadania” mientras en el mismo según han señalado “estaban presentes entre otros los representantes del PP, grupo que la pasada semana presentaba en las Juntas Generales de Bizkaia una proposición para que cualquier elemento de simbologia arquitectónica, incluida la simbologia franquista, sea conservado en el lugar que ocupa” y cuya presencia en este acto “muestra bien a las claras el soberbio ejercicio de cinismo de algunos y el sentido real del evento, que no puede ser visto sino como una aportación más del Consistorio bilbaino al modelo español de impunidad para los crimenes del régimen franquista”.