El PSE se sumó ayer a una moción aprobada en las Juntas de Guipúzcoa contra la prohibición por parte de la Audiencia Nacional y la posterior disolución a cargo de la Ertzaintza del homenaje a Juan Paredes 'Txiki', uno de los últimos etarras fusilados durante el franquismo. El texto, impulsado por Aralar, obtuvo el respaldo de todos los partidos excepto el PP. El documento insta a instituciones como el Gobierno vasco y los tribunales a hacer una «reflexión» para que los familiares de este militante de ETA «y de otras víctimas» de la dictadura «puedan seguir celebrando con normalidad» este tipo de actos.
La iniciativa surge después de que un juez impidiera la convocatoria prevista para el pasado 27 de septiembre en el cementerio de Zarautz, donde está enterrado el cuerpo de 'Txiki'. Ese mismo día la Audiencia Nacional también prohibió varios actos similares previstos en el 'gudari eguna' organizado por grupos ilegalizados.
A pesar de la anulación, familiares y amigos del etarra fusilado en 1975 se congregaron en las inmediaciones del camposanto, lo que obligó a la Ertzaintza a disolver a los presentes para hacer cumplir el auto judicial. El homenaje, convocado por la asociación Ahaztuak 1936-1977 -agrupación que trabaja en el ámbito de la memoria histórica-, se pudo celebrar un mes después, el pasado 25 de octubre con la presencia de más de 300 personas. Tras ese episodio, Aralar llegó a exigir al Gobierno vasco que pidiera «perdón» a los allegados de Paredes por su comportamiento o, de lo contrario, exigiría la dimisión del consejero de Interior, Rodolfo Ares.
«Verdad y justicia»
Los socialistas piden ahora, junto a la mayoría de las formaciones de las Juntas de Guipúzcoa, que los tribunales y el Ejecutivo de Patxi López tengan en cuenta las características especiales de esta clase de actos de recuerdo, además de reivindicar la labor del colectivo Ahaztuak en favor de «los valores de la verdad y la justicia» y contra «los crímenes cometidos durante el franquismo».
La portavoz de Aralar en la institución foral, Rebeka Ubera, se mostró satisfecha por haber podido alcanzar un acuerdo con el resto de partidos para aprobar la moción y puso especial énfasis en que, «de alguna manera», el PSE haya «reconocido que metió la pata» por impedir la celebración del homenaje. «Los familiares y amigos de 'Txiki' merecen el reconocimiento de esta Cámara», señaló antes de insistir en que el Departamento de Interior podía haber actuado «de otra forma» y con una mayor «proporcionalidad».
Por su parte, el representante del PP, Iñigo Arcauz, explicó que su partido no había secundado la moción porque 'Txiki', aun siendo un «defensor de la libertad», era también «miembro de ETA» y su homenaje se ha «instrumentalizado» en la actualidad por parte de Batasuna.
(El Correo Español. 5 / 11 / 09)