"Los rosales que mi patio tiene / poquito a poquito floreciendo estan / si la noche asesina a una rosa / al alba se abren otras pocas más / y en la lluvia sangrante la savia / que a futuras rosas color les dará…” (Popular)
Silvino Morán era minero y militante socialista. Tomó parte en la Revolución de Octubre de 1934 y tras el golpe del 18 de Julio fue comandante de un batallón republicano. Murió el 26 de Noviembre de 1937 en el Puerto del Rasón, en Asturies, tras enfrentarse durante horas a un destacamento de falangistas.
José Vitini era un militante comunista que hizo la guerra en el Ejercito de la República y tras la victoria franquista pasó a Francia donde participó en la Resistencia contra los nazis. En diciembre de 1944 regresó clandestino a Madrid para organizar en esa ciudad el primer núcleo urbano del Ejercito Guerrillero del Centro que el día 26 de Enero atacaría una subdelegación de FE-JONS, el partido fascista, acción en la que murieron dos falangistas. Detenido pocas semanas después es fusilado el 28 de abril de 1945: “Hemorragia multiple” fué la razón de su muerte según el parte del forense.
Casi veinte años después, el 10 de marzo de 1965 -según la escueta nota que la prensa fue autorizada entonces a publicar- el tambien guerrillero y comunista José Castro Veiga, “O Piloto”, moría tiroteado por la Guardia Civil en un pequeño pueblo de Lugo. El forense que certificó su muerte anotaría como causa del fallecimiento «hemorragia cerebral».
El 26 de Septiembre de 1975 el Consejo de Ministros reunido bajo la presidencia de Franco hacia público que “se daba por enterado” de la pena de muerte impuesta a cinco combatientes antifascistas y al dia siguiente, el 27 de Septiembre de 1975, los militantes independentistas y socialistas de ETA Angel Otaegi y Jon Paredes “Txiki”, y los comunistas del FRAP (Frente Revolucionario Antifascista y Patriótico) Xose Humberto Baena, Ramón Garcia Sanz y Xose Lois Bravo caian ante los balas de los pelotones de ejecución, tan fascistas estas balas como las que habian acabado en su dia con Silvino Morán, con José Vitini y con “O Piloto”. Los partes de defunción tampoco serían muy diferentes.
Silvino Morán, José Vitini, “O Piloto” y los fusilados el 27 de Septiembre tienen como vemos todo en común en lo que a su forma de lucha y tambien a su forma de muerte se refiere. Todos ellos optaron por enfrentar al fascismo a traves de la lucha armada y todos ellos hicieron posible que el regimen franquista no tuviera un solo año sin resistencia guerrillera en su contra. No tendría por tanto que haber ningún tipo de duda a la hora de catalogar a todos ellos como combatientes antifascistas y como victimas del franquismo. Y sin embargo si algo ha habido respecto a los fusilados del 27 de Septiembre ha sido un silencio tácito e incómodo en amplios sectores de la misma izquierda, compartido desde el mismo dia de su muerte e incluso antes, -recordemos por ejemplo como el PCE dio orden a los abogados de su órbita de no defenderlos-. Todos estos sectores, mientras no han tenido ningun complejo en considerar “victimas del terrorismo” a quienes murieron vistiendo los uniformes de la dictadura y defendiendola activamente –ejemplo de Melitón Manzanas, conocido torturador y colaborador de la Gestapo o el almirante Carrero Blanco, presidente del Gobierno y jefe de los Servicios Secretos- contribuyendo asi a legitimarla, siguen al dia de hoy poniendo reparos a la hora de considerar combatientes antifranquistas y victimas de la dictadura a los cinco fusilados el 27 de Septiembre… Muchos dirán que no es así per… ¿Se les ha levantado algún monumento oficial? ¿Se ha reconocido y reivindicado aunque sea retóricamente –cosa que esta tan al uso en este “Año de la Memoria”- su lucha? ¿Alguna Institución o político profesional ha “buscado la foto” estos días en torno a estas tambien victimas del franquismo? Evidentemente no. Siendo estos los fusilados más recientes, las ultimas condenas a muerte dictadas por el franquismo, las victimas de ese regimen más conocidas, son, sin embargo las mas olvidadas y aquellos sectores que en los ultimos treinta años hemos seguido reivindicando su memoria hemos sido muy concretos y siempre mirados como “políticamente incorrectos” quizás porque esa fecha, los hechos que en ella acaecieron, simboliza y cuestiona como ninguna otra la Transición que se iba a gestar, que ya se estaba gestando, los pactos de silencio y olvido, sobre los que aquella iba a construirse y se ha construido.
Hoy, en este nuevo 27 de Septiembre, desde “Ahaztuak 1936-1977” denunciamos ese cinismo a veces latente a veces evidente en tantos ámbitos políticos e institucionales y queremos rendirles nuestro más sincero homenaje, al igual que a Silvino Moran, a José Vitini, a “O Piloto” y a los miles de hombres y mujeres que empuñaron su dignidad, su voluntad y sus armas para enfrentar como consideraron que habian de hacerlo al fascismo. No entramos a valorar lo acertado o no de su elección en cada momento, sino el significado de su elección que para nosotros solo puede ser uno: enfrentar a un régimen que se habia impuesto con las armas, el terror y el genocidio sobre la voluntad expresada en las urnas y en la dinámica social de construir una sociedad más democratica, más libre y mas justa para personas y Pueblos.
Para ellos, al igual que para el resto de victimas del franquismo, exigimos su inclusión clara y sin medias tintas en la futura “Ley de Memoria Histórica” que debemos luchar por sacar adelante. Que sean incluidos en ella con todos los derechos y todos los honores junto a todas aquellas personas que formaron parte de las organizaciones guerrilleras o armadas antifranquistas y junto a aquellos miembros de las fuerzas armadas o de las fuerzas de orden público que permanecieron fieles a la legalidad republicana. Y exigimos tambien –al igual que para el resto de condenados durante la dictadura- la anulación de sus condenas, pero no desde desde planteamientos legalistas o periciales, impugnando los aspectos juridicos y formales de las causas, de los juicios y las condenas, sino desde la consideración de ilegitimidad del régimen, desde la consideración del carácter fascista de un Estado contra el que todos los metodos de lucha eran plenamente validos, desde los que comenzaron a resistir a él y a combatirlo con las armas en la mano el mismo dia del golpe del 18 de Julio, los que lo hicieron en los años 40 y 50 en montes y ciudades de Euskal Herria y de toda la peninsula, hasta los que lo siguieron haciendo en las décadas siguientes y de los que los militantes del FRAP y ETA fusilados el 27 de Septiembre eran parte. A todos los asumimos, a todos los reivindicamos, nuestras son todas y cada una de las batallas en que participaron –las que ganaron y las que perdieron-, rabiosamente nuestras las acciones que realizaron.
Con la memoria de sus sueños esbozamos hoy nuestro futuro.
Silvino Morán era minero y militante socialista. Tomó parte en la Revolución de Octubre de 1934 y tras el golpe del 18 de Julio fue comandante de un batallón republicano. Murió el 26 de Noviembre de 1937 en el Puerto del Rasón, en Asturies, tras enfrentarse durante horas a un destacamento de falangistas.
José Vitini era un militante comunista que hizo la guerra en el Ejercito de la República y tras la victoria franquista pasó a Francia donde participó en la Resistencia contra los nazis. En diciembre de 1944 regresó clandestino a Madrid para organizar en esa ciudad el primer núcleo urbano del Ejercito Guerrillero del Centro que el día 26 de Enero atacaría una subdelegación de FE-JONS, el partido fascista, acción en la que murieron dos falangistas. Detenido pocas semanas después es fusilado el 28 de abril de 1945: “Hemorragia multiple” fué la razón de su muerte según el parte del forense.
Casi veinte años después, el 10 de marzo de 1965 -según la escueta nota que la prensa fue autorizada entonces a publicar- el tambien guerrillero y comunista José Castro Veiga, “O Piloto”, moría tiroteado por la Guardia Civil en un pequeño pueblo de Lugo. El forense que certificó su muerte anotaría como causa del fallecimiento «hemorragia cerebral».
El 26 de Septiembre de 1975 el Consejo de Ministros reunido bajo la presidencia de Franco hacia público que “se daba por enterado” de la pena de muerte impuesta a cinco combatientes antifascistas y al dia siguiente, el 27 de Septiembre de 1975, los militantes independentistas y socialistas de ETA Angel Otaegi y Jon Paredes “Txiki”, y los comunistas del FRAP (Frente Revolucionario Antifascista y Patriótico) Xose Humberto Baena, Ramón Garcia Sanz y Xose Lois Bravo caian ante los balas de los pelotones de ejecución, tan fascistas estas balas como las que habian acabado en su dia con Silvino Morán, con José Vitini y con “O Piloto”. Los partes de defunción tampoco serían muy diferentes.
Silvino Morán, José Vitini, “O Piloto” y los fusilados el 27 de Septiembre tienen como vemos todo en común en lo que a su forma de lucha y tambien a su forma de muerte se refiere. Todos ellos optaron por enfrentar al fascismo a traves de la lucha armada y todos ellos hicieron posible que el regimen franquista no tuviera un solo año sin resistencia guerrillera en su contra. No tendría por tanto que haber ningún tipo de duda a la hora de catalogar a todos ellos como combatientes antifascistas y como victimas del franquismo. Y sin embargo si algo ha habido respecto a los fusilados del 27 de Septiembre ha sido un silencio tácito e incómodo en amplios sectores de la misma izquierda, compartido desde el mismo dia de su muerte e incluso antes, -recordemos por ejemplo como el PCE dio orden a los abogados de su órbita de no defenderlos-. Todos estos sectores, mientras no han tenido ningun complejo en considerar “victimas del terrorismo” a quienes murieron vistiendo los uniformes de la dictadura y defendiendola activamente –ejemplo de Melitón Manzanas, conocido torturador y colaborador de la Gestapo o el almirante Carrero Blanco, presidente del Gobierno y jefe de los Servicios Secretos- contribuyendo asi a legitimarla, siguen al dia de hoy poniendo reparos a la hora de considerar combatientes antifranquistas y victimas de la dictadura a los cinco fusilados el 27 de Septiembre… Muchos dirán que no es así per… ¿Se les ha levantado algún monumento oficial? ¿Se ha reconocido y reivindicado aunque sea retóricamente –cosa que esta tan al uso en este “Año de la Memoria”- su lucha? ¿Alguna Institución o político profesional ha “buscado la foto” estos días en torno a estas tambien victimas del franquismo? Evidentemente no. Siendo estos los fusilados más recientes, las ultimas condenas a muerte dictadas por el franquismo, las victimas de ese regimen más conocidas, son, sin embargo las mas olvidadas y aquellos sectores que en los ultimos treinta años hemos seguido reivindicando su memoria hemos sido muy concretos y siempre mirados como “políticamente incorrectos” quizás porque esa fecha, los hechos que en ella acaecieron, simboliza y cuestiona como ninguna otra la Transición que se iba a gestar, que ya se estaba gestando, los pactos de silencio y olvido, sobre los que aquella iba a construirse y se ha construido.
Hoy, en este nuevo 27 de Septiembre, desde “Ahaztuak 1936-1977” denunciamos ese cinismo a veces latente a veces evidente en tantos ámbitos políticos e institucionales y queremos rendirles nuestro más sincero homenaje, al igual que a Silvino Moran, a José Vitini, a “O Piloto” y a los miles de hombres y mujeres que empuñaron su dignidad, su voluntad y sus armas para enfrentar como consideraron que habian de hacerlo al fascismo. No entramos a valorar lo acertado o no de su elección en cada momento, sino el significado de su elección que para nosotros solo puede ser uno: enfrentar a un régimen que se habia impuesto con las armas, el terror y el genocidio sobre la voluntad expresada en las urnas y en la dinámica social de construir una sociedad más democratica, más libre y mas justa para personas y Pueblos.
Para ellos, al igual que para el resto de victimas del franquismo, exigimos su inclusión clara y sin medias tintas en la futura “Ley de Memoria Histórica” que debemos luchar por sacar adelante. Que sean incluidos en ella con todos los derechos y todos los honores junto a todas aquellas personas que formaron parte de las organizaciones guerrilleras o armadas antifranquistas y junto a aquellos miembros de las fuerzas armadas o de las fuerzas de orden público que permanecieron fieles a la legalidad republicana. Y exigimos tambien –al igual que para el resto de condenados durante la dictadura- la anulación de sus condenas, pero no desde desde planteamientos legalistas o periciales, impugnando los aspectos juridicos y formales de las causas, de los juicios y las condenas, sino desde la consideración de ilegitimidad del régimen, desde la consideración del carácter fascista de un Estado contra el que todos los metodos de lucha eran plenamente validos, desde los que comenzaron a resistir a él y a combatirlo con las armas en la mano el mismo dia del golpe del 18 de Julio, los que lo hicieron en los años 40 y 50 en montes y ciudades de Euskal Herria y de toda la peninsula, hasta los que lo siguieron haciendo en las décadas siguientes y de los que los militantes del FRAP y ETA fusilados el 27 de Septiembre eran parte. A todos los asumimos, a todos los reivindicamos, nuestras son todas y cada una de las batallas en que participaron –las que ganaron y las que perdieron-, rabiosamente nuestras las acciones que realizaron.
Con la memoria de sus sueños esbozamos hoy nuestro futuro.
**Este escrito fue enviado a todos los diarios de la CAV, siendo publicado hasta ahora en los dirios "Deia" (27/09/06) y "Gara" (27/09/06)