
El gran número de minas sembradas alrededor del muro convierte a la población saharaui en una de las comunidades más amenazadas del planeta y constituye uno de los principales motivos de inquietud del Secretario General de las Naciones Unidas, algo que queda acreditado en todos sus informes. Ci

Sin embargo, 36 años después de la puesta en marcha del sueño de aquellos jóvenes saharauis por construir su futuro en paz y libertad, denunciamos una vez más las razones e intereses que perpetúan un conflicto sobre el que la Corte Internacional de Justicia, órgano judicial principal de las Naciones Unidas, en su dictamen sobre el Sáhara Occidental, consideró aplicable la Resolución 1514 de la Asamblea General y, en particular, el principio de autodeterminación mediante la expresión libre y auténtica de la voluntad del Pueblo Saharaui. Queremos igualmente denunciar que el Estado español continúa siendo responsable legal y políticamente de esta tragedia. Sin embargo, los distintos gobiernos españoles, lejos de cumplir con sus obligaciones internacionales con la población de su ex colonia culminando el último proceso de descolonización pendiente del continente africano, han ejercido casi siempre de diplomáticos palaciegos manteniendo privilegiadas relaciones con la dictadura alauí, representada de forma inmejorable por el gran amigo de las autoridades españolas Mohamed VI, Emir de los Creyentes y máxima potestad civil y religiosa de Marruecos. (...).
36 años después, acompañando las denuncias del Frente Polisario, seguimos recordando la tragedia que vive el Pueblo Saharaui; 36 años después, decimos: Sáhara libre, sin muros ni minas y exigimos que se respete el principio de autodeterminación mediante la expresión libre y auténtica de la voluntad del Pueblo Saharaui; que se protejan los derechos humanos en los territorios ocupados y que la Misión de Naciones Unidas para el referéndum en el Sahara Occidental (MINURSO) asuma entre sus funciones la vigilancia de la situación de los derechos humanos en el territorio; y que se ponga fin al expolio ilegal de los recursos naturales en el Sahara Occidental.
(Noticias de Alava. 21 / 05 / 09)
