El 9,65% de los ciudadanos de la CAV que sufrieron una desaparición forzosa durante la Guerra Civil y los primeros años del franquismo falleció en otra comunidad. En la actualidad, la Dirección de Derechos Humanos del Gobierno Vasco, dependiente del Departamento de Justicia, conoce el lugar en el que fueron ocultados 7.336 ciudadanos vascos y, según esa información, uno de cada diez murió en otras partes del Estado. Se trata, en concreto, de 707 personas.
De ellas, más de la mitad (375 casos) perdió la vida en Asturias y una sexta parte (114) lo hizo en Cantabria. Esta presencia mayoritaria se produjo también en sentido inverso, con numerosos asturianos y cántabros muertos en Euskadi. Además, 28 vascos murieron en Madrid, 24 en Cataluña y La Rioja, siete en la Batalla del Ebro (librada en la parte más occidental de Tarragona y la más oriental de Zaragoza), tres en Huesca y Valladolid, dos en Galicia y Toledo, y uno en Soria, León, Castellón y Murcia.
764 franquistas Por otro lado, por lo que respecta a los fusilados en la Comunidad Autónoma Vasca, además de los 2.352 republicanos que se han incluido en el listado enviado al juez Baltasar Garzón, la Dirección de Derechos Humanos del Gobierno Vasco dispone de información relativa a otras 764 personas. Se trata, en concreto, de los muertos por los republicanos, es decir, los que combatieron con las tropas sublevadas.
En ese mismo bando, 5.700 personas fallecieron en el frente de batalla. Esta cifra es sensiblemente inferior a la de los republicanos, en cuyas tropas murieron 6.300 personas.
El listado de fusilados en la CAV, enviado por la Sociedad de Ciencias Aranzadi al Gobierno Vasco, fue remitido desde este último al propio Garzón a finales del pasado mes de septiembre.
(Noticias de Gipuzkoa. 26 / 10 / 08)
