Visitar el campo de concentración de Mathaussen haciendo abstracción del holocausto y fijando la atención en el fino alicatado de las cámaras de gas, la gran calidad de los ladrillos refractarios de los hornos crematorios, la enorme funcionalidad de los camastros diseñados para poder hacinar a la mayor cantidad de reclusos en el menor espacio posible. Esa viene a ser la propuesta del Gobierno de Navarra, el Ministerio de Defensa y el grupo cultural Iñigo Arista. Han organizado para los fines de semana de junio visitas guiadas al fuerte de San Cristóbal, y en ellas pretenden destacar única y exclusivamente las características arquitectónicas del recinto erigido a principios del siglo XX, "una de las fortificaciones más importantes de la época en España y Europa", en palabras del promotor de la iniciativa, el comandante general de Navarra, Jesús Joaquín Val Catalán. Una vez finalizada la visita, el historiador Ángel Marrodán, partícipe del proyecto, tuvo el cuajo de abogar por "hacer abstracción de las ideas políticas" y "quedarnos con la construcción".
El recinto fue durante la guerra y los años posteriores un campo de concentración en el que fueron encarcelados 4.800 presos republicanos. Setecientos noventa y cinco de ellos protagonizaron la mayor fuga jamás conocida en las cárceles franquistas. En la cacería humana posterior mataron a 210 de los fugados. En el recinto en total asesinaron a más de 700 republicanos. Para organizar visitas al fuerte obviando todo eso no basta con hacer abstracción de las ideas políticas. Hace falta, además, hacer abstracción de la historia, pues los hechos acaecidos en la fortificación mientras fue prisión franquista son algunos de los más destacados de la historia contemporánea navarra. Hace falta hacer abstracción de la justicia, pues es de justicia recordar el calvario sufrido por aquellos presos a causa de sus ideas políticas. Hace falta hacer abstracción de la decencia democrática, pues obviar la brutal represión franquista perpetrada en el monte Ezkaba es equiparable a negar las atrocidades de Mathaussen. En Alemania negar el Holocausto es delito. En Navarra, una actividad lúdica organizada al alimón por el Gobierno Foral y el Ministerio de Defensa, para entretener los fines de semana de junio de la ciudadanía pamplonesa.
(Noticias de Navarra. 04 / 06 / 09)