domingo, noviembre 05, 2006

RESPUESTA DE "AHAZTUAK 1936-1977" A SANTIAGO DE PABLO

"Ahaztuak 1936-1977" quiere responder al catedrático de Historia Contemporanea Santiago de Pablo en relación a su reflexión titulada “Todas las víctimas” publicada en El Correo Español-El Pueblo Vasco en su edición de Alava el 21 de Octubre.

"Ahaztuak 1936-1977" tiene constancia de los hechos ocurridos en Elosu en octubre de 1936, en los que un vecino de la localidad, apodado “El Buey”, asesinó a 17 personas. El ejecutor de la sangría estuvo acompañado por algún incontrolado más, milicianos asentados en Ollerías. Pero no obedecían a una decisión estratégica de la Junta de Defensa de Bizkaia, ni era una represalia contra el bando franquista. Podemos añadir incluso que la motivación de estos crímenes era una reyerta personal ocurrida meses antes en Elosu, que nada tenían que ver con la guerra civil que originó el golpe de estado contra la legalidad republicana. También aportamos el dato de que en este asesinato múltiple “El Buey” mató a miembros de su propia familia. Meses más tarde este salvaje incontrolado fue perseguido por gudaris del Batallón Araba que querían ajusticiarlo por ese crimen.
Un crimen que no era un ataque a “labradores carlistas” como lo define Santiago de Pablo. Nos parece una lectura incorrecta, también es falso que no se les recuerda 70 años después porque se considera que pertenecían al bando equivocado. No pertenecían a ningún bando, ni eran todos labradores y tampoco eran todos carlistas. La lectura que hicimos después de investigar el caso y hablar con los vecinos de Elosu, es que “El Buey” aprovechó la coyuntura para vengarse de un asunto personal.
Aún así, los golpistas sí consideraron esos acontecimientos como una actividad izquierdista, prueba de ello es la placa en el cementerio de Elosu que reza: “asesinados por las hordas marxistas” junto a los 17 nombres y a la fatídica fecha.
Al contrario que su análisis, nosotros no nos sumamos a esa interpretación franquista que falsea la realidad. Una manipulación propagandística corroborada por la versión oficial del Archivo General Militar de Avila y la Causa General registrada en el Archivo Histórico Nacional. Son fuentes totalmente viciadas en las que se acusa de todo tipo de falsedades al bando republicano: saqueos, violaciones, crímenes… que si ocurrieron nunca respondieron a una planificación definida por los que defendían la democracia y la libertad, sino a actuaciones de incontrolados o como en este caso que nada tenían que ver con la contienda.
Sin embargo, la estrategia asesina de los franquistas era premeditada y perfectamente diseñada por los cuadros de mando, con listas de desafectos a los que exterminar pueblo a pueblo, llenando de cadáveres cunetas y fosas comunes a su paso. Complementando esa limpieza ideológica con humillaciones, torturas, incautaciones, secuestros, encarcelamientos… Un ensañamiento que empezó en 1936 y se prolongó durante toda la dictadura, incluso tras la muerte del dictador.
No es necesario entrar en una guerra de cifras para reflejar qué supuso la represión franquista en Araba. Desde los primeros fusilamientos en las tapias de Santa Isabel en agosto de 1936 hasta los asesinatos del 3 de marzo de 1976, han sido más de 350 los fusilados y miles los represaliados, por contra los represores, sus complices y los beneficiarios han gozado y gozan de total impunidad.
Y ahora nos hemos revelado contra el silencio y el olvido que nos impuso el régimen primero y la “modélica” transición después. Exigimos verdad y justicia sobre unos crímenes de lesa humanidad, el franquismo fue un genocidio que ha quedado totalmente impune. No aceptamos el relativismo ni la amnesia, y mucho menos la incursión de maniobras de despiste como considerar los crímenes de Elosu como una actividad diseñada por el bando republicano.
Todas las víctimas tienen que ser recordadas. Nadie tiene el monopolio del sufrimiento, pero como nos decía hace poco la hija de un desaparecido las victimas del franquismo somos doblemente víctimas: por serlo y porque premeditadamente nos han negado la propia condición de serlo.
Con la memoria de sus sueños esbozamos hoy nuestro futuro.

Lander García Rodrigo
Portavoz de "Ahaztuak 1936-1977" en Araba.
(Publicado en la edición de Alava de El Correo Español-El Pueblo Vasco el 29 de Octubre de 2006)