sábado, abril 25, 2009

UNA LEY FRANQUISTA ANULA LA DE MEMORIA HISTORICA

LA ley de Memoria Histórica o ley de nietos llega a su cuarto mes de vigencia con miles de nacionalidades concedidas a nietos de ciudadanos españoles exiliados, pero ninguna a descendientes de españolas casadas en el extranjero, por culpa de una norma franquista que tiene a los consulados contra las cuerdas.
Si se es cubano, argentino, mexicano... y nieto de un ciudadano español se podrá durante dos años recuperar la nacionalidad en virtud de la Ley de Memoria Histórica aprobada por el Parlamento español y que entró en vigor en diciembre de 2008. Pero si se es cubano, argentino, mexicano... y nieto de una mujer con pasaporte español, es imprescindible que aquella no estuviera casada con un extranjero en el momento de ser madre.
Ésa fue la explicación con que se topó hace unas semanas Jorge Félix Medina, de 37 años, cubano y descendiente de abuela canaria. Cuando la Ley de Memoria Histórica entró en vigor, el 29 de diciembre, Medina, al igual que otros 135.000 cubanos, pidió su cita en el consulado español en La Habana. Se presentó hace un mes con un maletín lleno de documentos para acreditar fuera de toda duda la nacionalidad española de su abuela Felipa. Sin embargo, en el consulado le dijeron que la señora Felipa, fallecida en 1994, no podía transmitirle ese derecho porque se casó con un cubano y por tanto había perdido la nacionalidad antes de tener al padre de Medina. La explicación legal está contenida en la Ley de 15 de julio de 1954, que reforma el título del código civil "de los españoles y extranjeros", e interpreta que "la española que contraiga matrimonio con extranjero adquiere la nacionalidad de su marido". En su motivación, la norma franquista explica que "tanto en el régimen de adquisición como en el de la pérdida de la nacionalidad se mantiene el principio de la unidad de la familia como el más identificado con la tradición y los sentimientos de la nación española".
"Yo pensé que me estaban tomando el pelo", explica Medina, quien asegura que su abuela llegó a votar en España antes de fallecer.
En el consulado no saben cuántas personas se encuentran en la misma situación, pero al menos son cuatro los cubanos a quienes se ha denegado la nacionalidad por esta razón que han presentado recursos.
Los funcionarios no dudan en reconocer la colisión frontal de esa norma preconstitucional con la Carta Magna aprobada en 1978, pero argumentan que el propio régimen de irretroactividad del Código Civil impide encontrar una salida. "Este tema ha sido objeto de un revuelo grande y es una preocupación general en todos los consulados porque está suscitando un gran descontento", indican fuentes oficiales.
Con esta situación, las únicas abuelas españolas que se libran de la discriminación preconstitucional son las que tuvieron a sus hijos solteras y, según dijeron fuentes consulares, "está un poco en el aire la abuela que se casa pero que no se registra en el consulado".
"No estamos en 1954, estamos en 2009, y las cosas creo que han cambiado en España en estos años", subraya Alexina Fuentes, de 47 años, y también nieta de canaria casada con cubano. "No me voy a cortar las venas tampoco, pero yo voy a apelar y a apelar", asegura
(Deia. 25 / 04 / 09)