Como adelanto del contenido del libro y de sus argumentos centrales ofrecemos a los seguidorers de nuestro blog la nota de prensa que desde el "Autobús de la Memoria" se hizo pública el pasado més de Marzo al presentarse el Informe pericial sobre los derribos y destrozos habidos en el Fuerte.
Las personas y asociaciones abajo firmantes, especializadas en el trabajo de investigación histórica, conservación del patrimonio y recuperación de la memoria queremos hacer público que:
1. Tal y como se recoge en este informe “San Cristóbal / Ezkaba: muros derribados para amurallar la memoria”, los derribos realizados en el fuerte prisión de San Cristóbal, en Navarra:
- Suponen un claro daño al patrimonio histórico y cultural de esta comunidad, máxime tratándose de un BIC (Bien de Interés Cultural) que debería ser conservado en su globalidad, en aras de una correcta interpretación histórica y dinámica de la vida del edificio.
- Dificultan la comprensión del edificio como prisión, al haber hecho desaparecer uno de los muros que delimitaban uno de los espacios centrales de la vida de los presos, el patio.
2. Ante todo ello, queremos solicitar que:
- Los citados derribos y destrozos sean declarados ilegales, procediéndose a una intervención arquitectónica que visibilice los usos del edificio como prisión y que repare los daños causados.
- Se ponga en marcha un plan para la conversión del Fuerte de San Cristóbal en un lugar de memoria en el que se explique, de manera pedagógica, tanto su evolución histórica como su uso como prisión.
- En este último aspecto, nos parece necesario que se reflejen la pluralidad de opciones políticas y situaciones sociales de las personas allí encarceladas y de sus familiares, y se preste atención especial a una de las mayores iniciativas de resistencia colectiva puestas en marcha en las cárceles franquistas, la fuga de 789 presos el 22 de mayo de 1938.
- Además, queremos subrayar que el reconocimiento social a todos los sufrimientos padecidos por los presos de San Cristóbal y sus familiares debería ser una herramienta para fortalecer una cultura de respeto a los derechos humanos.