domingo, noviembre 25, 2007

MADRID: Digno homenaje a Carlos Palomino, joven antifascista asesinado, pese a la Delegación del Gobierno


En la tarde de ayer, 24 de noviembre, cientos de personas secundaron la convocatoria de la Coordinadora Antifascista de Madrid en homenaje al compañero Carlos Javier Palomino, asesinado por un militar fascista el 11 de este mismo mes.

Desde primeras horas de la tarde, grupos dispersos de militantes intentaban concentrarse en la Glorieta del Emperador Carlos V, punto de inicio de la manifestación convocada para las 17:00 horas. Al llegar a la glorieta se encontraron con un fuerte dispositivo policial (más de 30 "lecheras") que, en una actitud abiertamente agresiva, intentó impedir el acceso de muchos de estos grupos, identificando a bastantes personas. Los puntos más calientes se situaron en los accesos de Delicias, estación de Atocha-Renfe, y Ronda de Atocha, donde se juntaron grupos de varias decenas de activistas retenid@s.

Según iban pasando los minutos, se podían ver más y más grupos de manifestantes. La policía, muy provocadora, comenzó a desviar al grupo más nutrido hacia la Ronda de Valencia, mientras separaba a otros sectores en distintas zonas de la glorieta, "encajonando" a l@s activistas. Cuando l@s concentrad@s en la Ronda iniciaban una marcha-manifestación, se produjo una primera carga en el acceso desde la calle de Atocha, reteniendo e identificando a, al menos, un grupo de un@s 20 activistas. Mientras tanto, el bloque separado hacia el museo Reina Sofía continuaba la manifestación, con una fuerte presión policial. Al llegar a la altura del número 5 de la calle, desplegaron una pancarta, en la que se podía leer "Carlos, no te olvidamos" y "Contra la impunidad y la violencia de la extrema derecha", firmada por el Patio Maravillas.

La situación se precipitó al llegar a la Glorieta de Embajadores, donde la policia desvió a l@s manifestantes hacia el margen derecho y, allí, fueron nuevamente dividid@s en grupos, repartiéndose entre los accesos desde calle Embajadores, Miguel Servet y Ronda de Valencia. En este escenario se produjeron diversas cargas policiales, registrándose la más dura de ellas en la calle Miguel Servet, donde los antidisturbios dispeararon pelotas de goma. Cabe destacar que, pese a la desorganización incial de la marcha, propiciada en gran medida por las órdenes impartidas a la policía por Delegación del Gobierno, la actitud de las personas concentradas en la glorieta reflejó una gran madurez colectiva; sin caer en las sucesivas provocaciones de los antidisturbios, ni escapar atropelladamente de las cargas, el bloque se mantuvo compacto y unido en un escenario de enorme tensión y pocas opciones. Tras ser arrinconad@s hacia la calle Embajadores, gran parte de l@s manifestantes consiguió avanzar por ella hacia la Plaza de Cascorro, y de ahí hacia Latina. Luego de nuevos momentos de confusión, en la que la marcha se ha dividido en varios bloques (uno central, que se movió hacia la Puerta de Toledo, y pequeños grupos dispersados por la policía), empezó a circular una convocatoria por SMS y boca a boca para reconcentrar esfuerzos en Legazpi, y proceder al homenaje previsto en memoria de Carlos.

Nuevas cargas han tenido lugar en los accesos a Legazpi, que acabaron encerrando a l@s activistas entre dos glorietas, pese a lo cual consiguieron llegar a la parada de metro donde fue asesinado Carlos Javier Palomino. En una tensa situación, no exenta de solemnidad y emoción, dos personas subieron por una escalera al número 132 de la calle Delicias y colocaron una placa de granito, donde se puede leer: "Aquí fue asesinado Carlos Javier Palomino Muñoz el 11 de noviembre de 2007, a la edad de 16 años, luchando contra el racismo y el fascismo. Carlos, hermano, nosotr@s no olvidamos. El mejor homenaje, continuar la lucha". Después de desplegar una pancarta, con el lema "Carlos, no olvidamos", la manifestación se ha dado por finalizada.

(Texto y fotos: ""Rompamos el silencio")