Zarautz fue ayer el lugar elegido para rendir homenaje a los cinco fusilados del 27 de Septiembre de 1975 y a todos los fusilados por el regimen franquista. En esta localidad y respondiendo a la convocatoria de la asociación de victimas del golpe de estado de la represión y del régimen franquista "Ahaztuak 1936-1977" casi trescientas personas abarrotaron el salón de actos de los frailes antonianos, donde entre los asistentes se contaban tambien familiares de los homenajeados.
Tras la presentación realizada por un miembro de Ahaztuak sería el turno del bertsolari Jon Maia quien dedicaría sus sentidos bertsos a las personas de Txiki y Otaegi, arrancando los aplausos de la concurrencia. A continuación y de mano de dantzaris y txistularis del pueblo seria el momento del aurresku de honor ofrecido "a los cinco fusilados del 27 de Septiembre y a todos los que como ellos defendieron la libertad y la voluntad popular hasta las ultimas consecuencias, afrontando por ello sufrimientos de todo tipo e incluso la muerte, sin abjurar nunca de sus ideales ni de su compromiso".
Seguidamente serían los componentes de AK-37, grupo musical formado por jovenes del valle de Arratia que toman su nombre de la compañia de gudaris que se creó en este valle vizcaino en 1937, los que interpretarian el tema "Un simple Juan", dedicado a Jon Paredes, Txiki. Este tema es uno de los que este grupo esta preparando para ser incluido en el disco que Ahaztuak 1936-1977 en colaboración con el diario "Gara" editará para la Feria de Durango de este año, y ayer -como aportación de este grupo al homenaje- era la primera vez en que este tema era interepretado en público.
Algunos de los familiares se encontraban en las primeras filas y entre el publico, no siendo posible sin embargo la presencia de otros. Este fue el caso de Silvia Carretero -viuda de Jose Luis Sánchez Bravo- y de Flor Baena -hermana de Xose Humberto Baena-, militantes del Frente Revolucionario Antifascista y Patriotico (FRAP) fusilados tambien el 27 de Septiembre de 1975, que no pudiendo asistir en persona si hicieron llegar su apoyo y sendas cartas que fueron leidas en el acto. En ellas ambas reclamaban "no solo homenajes, sino tambien Justicia" a los "politicos profesionales e instituciones del Estado", asi como "la anulación de todas las condenas impuestas por el regimen franquista". "No nos equivoquemos -expresaba Silvia Carretero- hoy estamos hablando de los últimos fusilados por la horrenda Dictadura franquista, pero mi opinión es que debe de ser una conmemoración, un recuerdo de todos aquéllos que lucharon y murieron por defender la República y la Democracia, por eso, nunca admitiré una Ley de la Memoria Histórica promulgada con miedos y reservas, si el Gobierno piensa que tiene que cumplir un puro trámite para contentar a derechas o izquierdas, dejando en la cuneta las legales reivindicaciones democráticas que lo hagan, pero que no cuenten con mi apoyo. Quiero la anulación de todos los Consejos de Guerra desde el inicio de la sublevación militar fascista hasta los últimos, por la sencilla razón de que nosotros, no hicimos sino lo que nos correspondía, responder a una Dictadura Militar, impuesta por las armas".
Tras la lectura de esta carta sería el turno de un representante de Ahaztuak 1936-1977 que en una breve alocución se referiría tambien a la Ley de Memoria del PSOE ahora en ciernes, expresando el total rechazo de este colectivo "y de la practica totalidad de las entidades que trabajamos por recuperar la memoria historica democratica , asi como de los organismos que agrupan a victimas del franquismo". En su opinión se esta gestando "el broche de oro para la impunidad definitiva del regimen franquista y de sus verdugos, el definitivo asentamiento del modelo español de impunidad, comenzado con la Transición" ya que en esta Ley "todos aquellos a los que hoy homenajeamos seguiran siendo legalmente culpables y sus asesinos respetuosos seguidores de la legalidad fascista, algo que se incentiva desde el Gobierno PSOE y desde todos los que apoyen esta Ley que sigue mantiendo como validad legal y judicialmente hablando todos los juicios sin garantia alguna y todas las condenas salidas de esos juicios, incluidas las decenas de miles de penas de muerte".
La recta final del acto tendría como protagonista al cantautor salvadoreño "Txanba" que ofrecería su canción "Milonga del fusilado" "a todos los fusilados por el regimen franquista y a todos los caidos en la lucha por la Libertad, porque siguen vivos nuestros corazones y solo morirán de verdad si nosotros abandonamos la lucha por el mundo justo y libre que ellos soñaron".
Al finalizar, cantando el "Eusko Gudariak" y "La Internacional" los ojos enrojecidos de algunos de los familiares y de bastantes de los asistentes daban cuenta de la profundidad de los sentimientos y recuerdos que habian aflorado en este acto.
(Servicio de Prensa de "Ahaztuak 1936-1977")