En el dia de ayer en Argentina se dictaba condena contra los militares acusados en la causa de la Escuela de mecánica de la Armada (ESMA). Docena y media de militares integrantes de los conocidos como "grupos de tareas" -los encargados de las detenciones, las toruras, las desaparicones...- de este espeluznante centro de detención habilitado por los militares argentinos tras el golpe de estado del 24 de Marzo de 1976 eran sometidos a juicio después de 30 años de impunidad.
De todos ellos 12 fueron condenados a prisión perpetua, dos fueron condenados a 25 años de prisión y dos resultaron absueltos aunque seguirán presos al estar imputados en otras causas. Solamente es la punta del iceberg de lo que fue la trama genocida instalada en Argentina durante las sucesivas Juntas Militares que se alternaron entre 1976 y 1982, una trama compuesta aparte de por miembros de las FFAA, por policias, por jueces, por médicos, por sacerdotes, por politicos, por civiles... Los condenados ayer son unos de los más sanguinarios pero en ningún caso los únicos y su condena es un impulso para seguir luchando por condenar a todos los que faltan. Como dice Estela de Carlotto, de las "Abuelas de Plaza de Mayo" y presente en el juicio "faltan los civiles, los jueces cómplices... Y encontrar 400 nietos. Pero no hay que aflojar. Falta, pero hay que seguir avanzando".
Desde Ahaztuak 1936-1977 saludamos este juicio y estas condenas y felicitamos a todos aquellos sectores de la sociedad argentina que con su lucha sin desmayo contra la impunidad lo ha hecho posible, al igual que hará posible otros que aún estan pendientes. Felicitamos y nos fundimos en un abrazo emocionado y solidario con las familias de los miles y miles de desaparecidos, con los miles de torturados, de presos politicos, de exiliados... y con las familias y personas queridas de todos ellos. Y tambien con las personas conocidas o anónimas que desde su lucha cotidiana contra la impunidad durante décadas han posibilitado que este dia de justicia, que abre el paso a otros días tambien de justicia llegue.
Nuestra asociación ha venido manteniendo dentro de sus dinamicas de reflexión y movilización una especial relación con la lucha contra la impunidad en Argentina, para nosotros un referente en muchos parámetros y fundamentalmente en el de la irrefutable validez de la lucha popular como única garantia de conseguir la Verdad, la Reparación y la Justicia. Varias veces nos hemos concentrado para expresar nuestra solidaridad con la lucha contra la impunidad en Argentina o contra la desaparición de ciudadnos argentinos que han sido testigos claves en juicios como los represores, como es el caso del aún desaparecido Julio López.
En nuestras concentraciones, siempre esta presente una pancarta en la que puede leerse "Kolpistak, genozidak. Argentinan epaituak. Hemen zergatik ez?" (Golpistas, genocidas. Juzgados en Argentina. Aqui porqué no?) y junto con ella otra pancarta hacia alusión a la desaparición aún sin esclarecer de los ciudadanos vascos Eduardo Moreno Bergaretxe, "Pertur", y Jose Miguel Etxebarria, "Naparra", asi como de los ciudadanos argentinos Julio Lopez y Luciano Arruga, presumiblemente victimas todos ellos -los dos primeros en Euskal Herria y los otros dos en Argentina- de la acción de bandas parapoliciales encuadrados en la guerra sucia del Estado contra sectores de la oposición política, en el caso argentino, testigos incómodos y activos en las denuncias contra los responsables del régimen dictatorial que rigió ese pais entre 1976 y 1982.
Y hoy al igual que en esas concentraciones desde Ahaztuak 1936-1977 queremos denunciar nuevamente la evidencia del modelo de impunidad vigente en el estado español para los crimenes del régimen franquista, una evidencia más marcada y dolorosa si cabe en este día por el juicio y las condenas que el Estado argentino ha sido capaz de llevar a cabo contra genocidas de la talla de Alfredo Astiz, Ricardo Cavallo, Jorge Acosta, y otros mientras en el estado español ni uno sólo de los responsables politicos, militares, policiales o judiciales del régimen franquista -y por tanto de sus crimenes- ha pasado nunca por ningún tribunal a pesar de que tanto el estado argentino como el español tienen suscritos diferentes acuerdos internacionales que proclaman que los delitos de Lesa Humanidad o de Genocidio no prescriben nunca. El cumplimiento de estos acuerdos es el que entre otros factores hace posible hoy la condena a estos genocidas en Argentina y es su incumplimiento lo que posibilita la impunidad para crimenes y hechos similares cometidos por los franquistas en el estado español, algo que creemos deja en muy mal lugar al sistema politico español y con unas grandes sombras a sus declaraciones de sistema plenamente democratico.
Lo ocurrido ayer en Argentina y lo que no ocurre en el Estado español no hace sino confirmarnos en la necesidad de continuar en nuestra lucha contra la impunidad de los crimenes del régimen franquista y de sus autores y en nuestro convencimiento de que sólo la denuncia y la movilización sin desmayo por parte de las victimas, de sus familiares y de aquellos sectores que entendemos que la Verdad, la Reparación y la Justicia deben ser aplicadas en su totalidad es la única posibilidad y garantia de que tambien en Euskal Herria y en el Estado español algun dia el modelo de impunidad vigente toque a su fin y sean juzgados los responsables del genocidio franquista en sus multiples expresiones y complicidades, incluida tambien la complicidad “democratica” ya sea disfrazada de “Ley de Amnistia”, de “Ley de Memoria Histórica” o simplemente de dejación y pasividad.
AHAZTUAK 1936-1977
De todos ellos 12 fueron condenados a prisión perpetua, dos fueron condenados a 25 años de prisión y dos resultaron absueltos aunque seguirán presos al estar imputados en otras causas. Solamente es la punta del iceberg de lo que fue la trama genocida instalada en Argentina durante las sucesivas Juntas Militares que se alternaron entre 1976 y 1982, una trama compuesta aparte de por miembros de las FFAA, por policias, por jueces, por médicos, por sacerdotes, por politicos, por civiles... Los condenados ayer son unos de los más sanguinarios pero en ningún caso los únicos y su condena es un impulso para seguir luchando por condenar a todos los que faltan. Como dice Estela de Carlotto, de las "Abuelas de Plaza de Mayo" y presente en el juicio "faltan los civiles, los jueces cómplices... Y encontrar 400 nietos. Pero no hay que aflojar. Falta, pero hay que seguir avanzando".
Desde Ahaztuak 1936-1977 saludamos este juicio y estas condenas y felicitamos a todos aquellos sectores de la sociedad argentina que con su lucha sin desmayo contra la impunidad lo ha hecho posible, al igual que hará posible otros que aún estan pendientes. Felicitamos y nos fundimos en un abrazo emocionado y solidario con las familias de los miles y miles de desaparecidos, con los miles de torturados, de presos politicos, de exiliados... y con las familias y personas queridas de todos ellos. Y tambien con las personas conocidas o anónimas que desde su lucha cotidiana contra la impunidad durante décadas han posibilitado que este dia de justicia, que abre el paso a otros días tambien de justicia llegue.
Nuestra asociación ha venido manteniendo dentro de sus dinamicas de reflexión y movilización una especial relación con la lucha contra la impunidad en Argentina, para nosotros un referente en muchos parámetros y fundamentalmente en el de la irrefutable validez de la lucha popular como única garantia de conseguir la Verdad, la Reparación y la Justicia. Varias veces nos hemos concentrado para expresar nuestra solidaridad con la lucha contra la impunidad en Argentina o contra la desaparición de ciudadnos argentinos que han sido testigos claves en juicios como los represores, como es el caso del aún desaparecido Julio López.
En nuestras concentraciones, siempre esta presente una pancarta en la que puede leerse "Kolpistak, genozidak. Argentinan epaituak. Hemen zergatik ez?" (Golpistas, genocidas. Juzgados en Argentina. Aqui porqué no?) y junto con ella otra pancarta hacia alusión a la desaparición aún sin esclarecer de los ciudadanos vascos Eduardo Moreno Bergaretxe, "Pertur", y Jose Miguel Etxebarria, "Naparra", asi como de los ciudadanos argentinos Julio Lopez y Luciano Arruga, presumiblemente victimas todos ellos -los dos primeros en Euskal Herria y los otros dos en Argentina- de la acción de bandas parapoliciales encuadrados en la guerra sucia del Estado contra sectores de la oposición política, en el caso argentino, testigos incómodos y activos en las denuncias contra los responsables del régimen dictatorial que rigió ese pais entre 1976 y 1982.
Y hoy al igual que en esas concentraciones desde Ahaztuak 1936-1977 queremos denunciar nuevamente la evidencia del modelo de impunidad vigente en el estado español para los crimenes del régimen franquista, una evidencia más marcada y dolorosa si cabe en este día por el juicio y las condenas que el Estado argentino ha sido capaz de llevar a cabo contra genocidas de la talla de Alfredo Astiz, Ricardo Cavallo, Jorge Acosta, y otros mientras en el estado español ni uno sólo de los responsables politicos, militares, policiales o judiciales del régimen franquista -y por tanto de sus crimenes- ha pasado nunca por ningún tribunal a pesar de que tanto el estado argentino como el español tienen suscritos diferentes acuerdos internacionales que proclaman que los delitos de Lesa Humanidad o de Genocidio no prescriben nunca. El cumplimiento de estos acuerdos es el que entre otros factores hace posible hoy la condena a estos genocidas en Argentina y es su incumplimiento lo que posibilita la impunidad para crimenes y hechos similares cometidos por los franquistas en el estado español, algo que creemos deja en muy mal lugar al sistema politico español y con unas grandes sombras a sus declaraciones de sistema plenamente democratico.
Lo ocurrido ayer en Argentina y lo que no ocurre en el Estado español no hace sino confirmarnos en la necesidad de continuar en nuestra lucha contra la impunidad de los crimenes del régimen franquista y de sus autores y en nuestro convencimiento de que sólo la denuncia y la movilización sin desmayo por parte de las victimas, de sus familiares y de aquellos sectores que entendemos que la Verdad, la Reparación y la Justicia deben ser aplicadas en su totalidad es la única posibilidad y garantia de que tambien en Euskal Herria y en el Estado español algun dia el modelo de impunidad vigente toque a su fin y sean juzgados los responsables del genocidio franquista en sus multiples expresiones y complicidades, incluida tambien la complicidad “democratica” ya sea disfrazada de “Ley de Amnistia”, de “Ley de Memoria Histórica” o simplemente de dejación y pasividad.
AHAZTUAK 1936-1977