domingo, julio 26, 2009

EL "PUENTE DE HIERRO" DE DONOSTIA FUE EL ESCENARIO DE UN ACTO EN MEMORIA DE L@S DESAPARECID@S

En un caluroso mediodía y en el lugar donde se hallaba el conocido como “Puente de Hierro” en Donostia, la asociación de victimas del golpe de estado, de la represión y del régimen franquista Ahaztuak 1936-1977 realizó ayer un acto en memoria de los miles de desaparecidos habidos en Euskal Herria y en toda la península tras el golpe de estado del 18 de Julio de 1936. El lugar elegido para realizarlo no ha podido resultar más apropiado, toda vez que en las obras que se estan realizando en este puente que cruza sobre el rio Urumea han sido descubiertas hace escasamente tres semanas dos fosas que albergaban los cuerpos de siete personas “paseadas” por las fuerzas franquistas tras su entrada en la capital donostiarra el 13 de Septiembre de 1936. El acto se ha celebrado justo en el lugar donde se hallaban los cuerpos.

Vigilados por varios coches patrullas de la Ertzantza alrededor de un centenar de personas han escuchado al historiador Iñaki Egaña, una de las personas que han trabajado en la exhumación de las dos fosas halladas y que ha señalado “la tragedia que supone el seguir encontrando aún hoy dia cuerpos de victimas de la represión franquista arrojadas en fosas desconocidas, hurtandolos al duelo y al cariño de sus familiares que los reclaman desde hace tantos años”. Egaña dio cuenta de las investigaciones que con base en el ADN de los cuerpos hallados se estan realizando y que aquizas en fechas próximas den los frutos esperados y alguien “pueda por fin encontrar en estos huesos a su familiar tan buscado y la cruel pero quizas liberadora respuesta a una pregunta arrastrada desde hace tantos años”.

A continuación un joven bertsolari ha cantado a la memoria de los miles de desaparecidos “memoria que nos marca un camino hacia un nuevo dia de justicia, paz y libertad” y tras el el ha sido el turno de un representante de Ahaztuak 1936-1977. Con el fondo de siete siluetas que representaban a los siete cuerpos hallados, junto a la ikurriña, la enseña republicana y las banderas anarquista y comunista que presidian el acto, un miembro de estea asociación ha tomado la palabra para señalar que “tener memoria es un derecho personal y colectivo, pero tambien es un deber democrático porque la memoria que reivindicamos, por ser democrática y antifascista es conseguir la verdad, la justicia y la reparación que venimos pidiendo desde hace setenta años, que seguimos buscando a nuestros desaparecidos, que seguimos pidiendo el fin del modelo español de impunidad para los crímenes del franquismo como crímenes de genocidio y lesa humanidad que son”. El representante de Ahaztuak señaló tambien que “esa falta de justicia para los crímenes del franquismo y el intento de acallar la memoria de las victimas de ese regimen repercute de manera directa en la endeblez democrática del sistema politico que tenemos, en los comportamientos de determinados sectores de la democracia actual donde nos vemos obligados a seguir preguntando quienes son estos aquí enterrados y donde estan los otros cientos, miles…” señalando como en el caso de Donostia y de Guipúzcoa “no solamente estamos hablando de los desaparecidos en la posguerra inmediata, sino tambien de desaparecidos en las postrimerías del franquismo como es el caso de Eduardo Moreno Bergaretxe o ya en la misma democracia, como son los casos de Jose Miguel Etxeberria o el reciente de Jon Anza, hechos que una democracia verdadera debe investigar, aclarar y erradicar totalmente ”.

Al termino de su alocución los presentes han cantado el tema “Mendian gora haritza” del desaparecido Imanol tras lo cual dos dantzaris han interpredo un aurresku de honor para acto seguido dar paso a una ofrenda floral en la que muchas de las personas asistentes han ido colocando rosas frente sobre una ikurriña tendida a los pies de las siete siluetas negras que representaban a los sepultados en las dos fosas aquí halladas, momento que ha sido el de mayor emotividad acompañado por un elocuente silencio y más de una lagrima.

La presencia de las patrullas de la Ertzantza que apremiaban para la finalización del acto y que han llegado incluso a impedir a varias personas retrasadas acercarse al interior de las obras, al lugar donde estaban las fosas halladas y donde se celebraba el homenaje, ha sido el punto discordante e incomodo de este acto lleno de sentimiento y de memoria que ha concluido con el canto del “Eusko Gudariak” y “La Internacional” por parte de los alli presentes.

(Agencias. Servicio de prensa de Ahaztuak 1936-1977)