El Foro de la Memoria de Guadalajara presentó el jueves una solicitud de subvención al Ministerio de la Presidencia para la publicación de la investigación que lleva a cabo sobre la represión franquista en la provincia. El estudio les ha llevado a estudiar unos 4.500 expedientes judiciales, en un trabajo de campo que aborda por vezprimera de forma global y exhaustiva la cantidad y los motivos de la indiscriminada respuesta del bando franquista contra quienes no se sumaron a su causa.
“Guadalajara ya no es un espacio vacío en los mapas de la memoria histórica de nuestro país”, afirmaba ayer el portavoz del Foro por la Memoria de Guadalajara, Xulio García Bilbao. “Hasta ahora había estudios de casos concretos, pero no definitivos y globales como éste”, defiende, después de dar por cerrada la revisión de los expedientes y de solicitar la subvención estatal.
PRIMEROS PASOS
El trabajo de estudio de los ficheros de cada uno de los 4.500 casos extraidos a partir de los datos del Archivo Histórico Provincial abre el camino hacia actuaciones concretas, desde exhumaciones –han estudiado dos posibilidades en Sigüenza, una de ellas desestimada y la otra por concretar– hasta restitución de una estadística que no existía para el estudio de este capítulo de la historia en la provincia. El estudio que pretenden publicar –también en formato digital– contará también con un anexo en el que se expondrá la relación con las víctimas.
En este sentido, García Bilbao es categórico al afirmar que los datos que ahora manejan en el Foro de la Memoria “destruye las cifras que mantenía un autor anterior, Jesús Larrazabal, que indicaba que en la retaguardia de la Guerra Civil y durante el Franquismo hubo 789 víctimas de la represión”. Incluye entre ellas, recuerda ahora García Bilbao, a cuarenta de la Catedral de Sigüenza, otros muchos de Molina y varios pueblos conforme avanzaba el ejército nacional o la multitud de fusilados junto al Cementerio de Guadalajara.
Los números de la tragedia en la provincia son mucho mayores, según el Foro. Cuentan 823 sólo con los asesinatos por vía judicial –en los tribunales militares que, para García Bilbao, eran “simulacros de juicio”–. Pero fueron más, teniendo en cuenta los fusilados antes de pasar por estos tribunales, los fusilados en otras provincias o los que corrieron igual suerte por culpa de venganzas que no conocieron juicio alguno.
LAS GRANDES REPRESALIAS
Dos grandes represalias destacan en la investigación que ha llevado a cabo esta plataforma –no es una asociación de familiares–. Se trata de los asesinados tras la toma de la Catedral de Sigüenza, donde se habían refugiado numerosas personas a la entrada de las tropas nacionales, en octubre de 1936. El espeluznante episodio tiene su correspondencia en la sangre derramada de quienes fueron fusilados al momento. De inicio, se calcula que unas 150 personas fueron asesinadas y enterradas en algún lugar del Alto de Barahona. Se salvaron las mujeres, los niños y un nutrido grupo de prisioneros. De las 850 personas que salieron del templo, setecientas fueron llevadas a la cárcel de Soria. “Un mes después, durante una visita del general Moscardó a esa prisión, sólo quedaban vivos 175”. Esta represión también se vivió en el Cementerio de Guadalajara. En la capital arriacense se cuentan 823 asesinados mediante estos dudosos procesos judiciales.
Los 4.500 expedientes judiciales que se han estudiado en esta investigación son dramas personales con el denominador común de haber sido juzgados por la Auditoría de la Guerra de Guadalajara, habiendo casos de absueltos –los menos– y de condenados, muchos de ellos ajusticiados. Las condenas en estos tribunales militares legitimados por el Franquismo vienen acompañadas de tres tipos de delitos: rebelión militar, auxilio a la rebelión e incitació a la rebelión. Tres grados de una escala en la que se incluía a todo aquel que no cerró filas en torno al Bando Nacional, desde los más pasivos –simplemente no apoyaron a Franco– hasta los que se enfrentaron más activamente al ejército sublevado y las autoridades constituidas en este bando.
EL FORO SE PLANTEA MÁS PRESENCIA EN LA CALLE
El Foro de la Memoria de Guadalajara busca más presencia en la calle durante 2009. Si hasta ahora ha llevado a cabo una labor exhaustiva pero silente bajo los flexos, estudiando los expedientes judiciales de su investigación, considera que es momento de darse a conocer, ya que su actividad no se ha difundido todavía entre la opinión pública. De ahí que se anuncie que se llevará a cabo una jornada informativa –con la fecha todavía sin determinar–, a la vez que se plantea responder con un acto en Guadalajara a la convocatoria a nivel nacional de una movilización, fijada para el domingo 1 de febrero. Esta fecha ha sido señalada por la Federación Estatal de Foros por la Memoria como el momento de exigir “una respuesta contra la impunidad de los crimenes del Franquismo”, en palabras del portavoz de la organización en Guadalajara, Xulio García Bilbao. En principio, estos actos de protesta tendrán como lugar común para la concentración las diferentes delegaciones y subdelegaciones del gobierno. En Guadalajara mantienen en estos momentos las dudas, aunque barajan convocar el acto o, de lo contrario, “acudir a la manifestación de Madrid”.
(El Dia en Castilla La Mancha. 17 / 01 / 09)