sábado, marzo 07, 2009

LA DES"FACHA"TEZ DEL AYUNTAMIENTO DE IRUÑA. Patxi Belasko Alza y Xabier Torregrosa Goñi, miembros de Ahaztuak 1936-1977

Tomás Domínguez Arévalo, Conde de Rodezno, una persona que, además de ministro de Justicia en un gobierno fascista de Franco, fue responsable, entre otras muchas cosas, del exterminio político y asesinato de miles de personas. Es, además, un ejemplo de la simbología franquista que sigue presente en muchas de nuestras calles y plazas.

El próximo mes de abril se cumplirán 70 años de la finalización de la guerra. Y después de todo este tiempo, tenemos que seguir soportando a nuestro alrededor nombres y simbología que representan la apología más descarada del régimen franquista. ¿Realmente, somos conscientes de la magnitud de la represión franquista? Parece que no, de lo contrario no es entendible el mantenimiento de esta situación.

La explicación, por una parte, puede ser la del terror. Un terror que anestesió la memoria histórica colectiva y enmudeció la memoria individual, haciendo muy difícil su transmisión. Y seguimos sufriendo sus consecuencias.

Y por otra parte, ¿cómo entender lo costoso que les resulta la retirada de cualquier símbolo franquista? La explicación, a nuestro entender, reside en que, aquí en Nafarroa, en una zona donde no hubo frente de guerra, y la represión se llevó por delante más de 3.000 asesinados, una serie de familias se hicieron con el poder económico y político, lo mantuvieron durante los 40 largos años de franquismo y, en la actualidad, lo siguen manteniendo a través de sus herederos políticos y en muchos casos biológicos.

¡Franco sigue vivo!; no se ha hecho justicia, los cuneteros no han pagado por sus crímenes, los responsables siguen impunes, se sigue despreciando la memoria de los asesinados, nunca se ha revisado la herencia política del franquismo y lo que estamos viviendo en el actual contexto político es consecuencia de ello, ni más ni menos que la continuación del franquismo.

Y para muestra lo sucedido en el pleno del Ayuntamiento de Iruñea: se presenta una moción solicitando el cambio de nombre para la plaza de Conde Rodezno, y se llega a un acuerdo a través de una enmienda, en la que se solicita el cambio de nombre para dicha plaza, dejando la nueva denominación a un posterior acuerdo y consenso entre los diferentes grupos municipales, enmienda que es apoyada por toda la oposición, y ante la cual, la postura de UPN es una tomadura de pelo de tal envergadura que podría calificarse como el chiste del año, si no fuera por la seriedad y gravedad del tema.

Hay que recordar también, que nos encontramos ante uno de los símbolos propios del régimen franquista que quedan sujetos a lo que establece la disposición transitoria única de la Ley de Símbolos de Navarra: “En el plazo de un año desde que la entrada en vigor de esta ley Foral, las autoridades en ellas referidas procederán a la retirada y sustitución de la simbología propia del régimen franquista…”
Y de esto van a pasar ya seis años.

Pues bien, la respuesta de UPN es la de recordarnos que es un tema cuya competencia es de alcaldía y no de pleno, pero que en su competencia, harán cumplimiento de la ley retirando la simbología franquista de esa plaza, y ¿cómo?: revocando la decisión del ayuntamiento, que el mismo año de la muerte de Tomás Domínguez Arévalo “Conde de Rodezno”, en 1952, decidió poner su nombre a esta plaza, y manteniendo el nombre de Conde Rodezno a título genérico, como título nobiliario.

La treta es tan burda que, además de producir vergüenza ajena, es un insulto a la memoria de los represaliados por el franquismo. Nosotros y nosotras desde Ahaztuak 1936 / 1977, colectivo en el que trabajamos por la recuperación de la memoria, exigimos:

· El cambio de nombre de la plaza Conde de Rodezno, no solamente por imperativo legal, sino también y, sobre todo, por ser una demanda social mayoritaria.
· Consensuar el cambio de nombre para la plaza, pero no solamente (y aquí nuestro tirón de orejas a los que presentaron la moción y enmienda en el pleno del ayuntamiento) entre los grupos municipales, sino con todos los colectivos y asociaciones que trabajamos la recuperación de la memoria y estemos interesados en este tema.
(Gara. 7 /03 / 09)